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sábado, 29 de noviembre de 2008

Sí, los borregos también ven la televisión.



Estudios recientes, llevados a cabo por investigadores del INIF (Instituto Nacional de Investigaciones Falsas), demuestran que a los borregos les gusta ver la televisión. Lo cual no me extraña, eso explica la exitosa carrera de los publicistas. Estoy harto de que los publicistas nos traten como simples borregos creando mitos y falsedades sobre sus productos para manipularnos. Ante tanta falsedad, decidí crear este texto con toda mi sinceridad. Como miembro de la INIF este fue mi informe sobre el caso “Los borregos también ven la televisión.”:


A continuación analizaremos algunos de los anuncios más famosos (vale, el de la crema de baba de caracol igual no lo conocéis, dado que se emitió durante muy poco tiempo, debido a su nula credibilidad incluso para los borregos.):


Empecemos por una conocida marca de yogures, Petitsuis, ya sabeis el de “dos yogures de Petitsuis en cada comida ayudan a crecer hasta lo más alto”. Me pasé la infancia comiéndome dos en cada comida, sí, dos “packs” de seis yogures, y sin embargo mis compañeros ahora me llaman “el chiquitín”. En sus anuncios nos venden que si nos tomamos, no uno, sino dos Petitsuis creceríamos desorbitadamente. Pero está claro que de ese modo lo único que crecía desorbitadamente eran las ganancias de este producto.


Otra de las marcas más embusteras, era la de Axe ¿Quién no recuerda sus anuncios? Tíos que triunfaban solo con ponerse Axe. Su eslogan favorito “Márcales el camino”, y una mierda, a mí el camino me lo marcaban ellas y no el camino a la cama, sino a la mierda.


Pasemos rápidamente a aquellos anuncios cuyo fraude era tan descarado que resultaba hasta gracioso. ¡Recordad ese magnifico plan Special K! “Una dieta equilibrada, hacer un poco de ejercicio y un bol de Special K ayudan a mantener tu línea. Claro, es como decir: Un buen plan para adelgazar es hacer ejercicio, una buena dieta y darme un euro al día, seguro que te sientes más ligera, sino tú, tu cartera. Por favor ¿Tan idiotas nos consideran los publicistas? “Como todo el mundo sabe, solo hace falta hacer deporte y una dieta equilibrada para adelgazar, para lo único que sirven los Special K es para cagar, para cagarte en la madre del creador de esos insípidos cereales.”


Otro anuncio que me divierte mucho y todavía no se si lo han hecho a propósito, es el del caldo de la abuela de Knork, aparece un grupo de amigos comiendo y al probar la sopa uno dice “este es el caldo que hacía mi abuela” Y salta otro y dice “¿Qué dices? Es como el de mí abuela.” Y así sucesivamente. Vaya, vaya, al parecer todas las abuelas del mundo son unas embusteras. No cocinaban ellas mismas sus caldos con todo el cariño y la dedicación del mundo, todas las abuelas usaban Knork. Esta claro que lo que pretendían con este anuncio era decir que su caldo estaba tan bueno como uno tradicional. Pero, en cualquier caso, o bien las abuelas son unas farsantes o bien lo son los de Knork y obviamente apuesto por los de Knork.


Pero el anuncio que se llevó la palma, e hizo que me lanzase a realizar esta investigación, fue el de la crema de baba de caracol. Entiendo que con el nombre de mierda del producto, la publicidad de este debía ser más agresiva. Solo con el nombre “crema de baba de caracol” ya tienes suficientes motivos para no comprarlo y para descojonarte un rato de todos aquellos que lo lleven puesto en la cara. Bueno de los que lo lleven puesto y de los que se gasten un dineral en algo tan natural, si quieren baba de caracol que se vallan al campo y seguro que volverán con la piel de la cara reluciente ¿Reluciente de juventud? No, de babas. En fin, en ese anuncio salían unos campesinos recolectando lechugas y una voz en off te informaba “Los caracoles escondían un gran secreto, con su baba, protegían y cuidaban las manos de los campesinos.” Vaya secreto, impresionante, resulta que los campesinos que se pasaban todo el día recogiendo lechugas y labrando la tierra tenían las manos más finas que la propia emperatriz. No se como se podían quejar de su trabajo, vale que trabajasen al sol durante horas, pero por lo menos la manicura la tenían pagada.


Termina aquí el informe, debido a que no puedo dejar de reírme, con una reflexión. Si los humanos, seres dotados de una inteligencia suprema, no son tan estúpidos como para creerse esas tonterías ¿Para quién hacen los anuncios? Para los borregos, luego queda ya demostrado, los borregos también ven la televisión. Espero que ahora miréis los anuncios con otros ojos y no con ojos de cordero.

.............................................Primer informe del INIF a 28 de noviembre de 2008


1 comentario:

Ácrata dijo...

Jaja es genial, me ha encantado!
Me he reido bastante con lo de la crema de baba de caracol, y es que hace ya bastantes meses me llamó una tía de esas que va tocando las narices promocionando productos absurdos aconsejándome usar "el fantástico producto de belleza creado a base de baba de caracol" ya te digo, al oír la palabra "baba" seguida de "caracol" fui corriendo a comprarlo, ahora parezco la Duquesa de Alba.
No, en serio, me alegro de que te hayas atrevido a sacar este texto a la luz.
Un besito y hasta otra :)